El periodista debe ser aquel ser inmaculado que está solo al servicio de la “verdad” y que no tiene que decir “esta boca es mía”.
El 2 y 3 de febrero se recordaron 23 años en que un golpe militar –con las armas, por supuesto- derrocó a la dictadura del Gral Alfredo Stroessner, que por 35 años detuvo, torturó, exilió o hizo desaparecer a quienes se le oponían, mientras un grupo “era feliz y no lo sabía” con el robo multimillonario que realizaba de las arcas del estado.
Esos días fueron propicios para que el productor argentino Alejandro Stoessel anuncie que se está en conversaciones con la ex modelo Graciela Alfano y el multimillonario Ricardo Fort, para que integren el jurado de la versión paraguaya del programa “Bailando por un sueño”.
Graciela Alfano fue citada en la Argentina, en carácter de denunciada, en una causa que investiga la apropiación de bienes de detenidos desaparecidos, durante la dictadura militar que gobernó –con las armas, por supuesto- al vecino país en la década del 70. El propio Marcelo Tinelli –de la versión argentina de “Bailando por un sueño”- parece que decidió finalmente prescindir de ella, pese a que Canal 13 de Buenos Aires, pertenece al Grupo Clarín de pública vinculación con la pasada dictadura militar.
Paloma -una tía de Ricardo Fort- denunció recientemente que habría sido despojada de su herencia mediante la firma de un documento, que se habría realizado ante jueces de la época de la dictadura militar argentina que – con las armas, por supuesto- gobernó al vecino país. Tinelli también se deshizo de Fort en temporadas pasadas.
Cada uno de ellos podría decir que “era feliz y no lo sabía” en la época de la dictadura militar argentina. Lo trágico es que ahora se anuncia que podrían ser “felices” en Paraguay, justo cuando se conmemora la caída de la dictadura militar paraguaya del Gral. Alfredo Stroessner, quien fue derrocado –con las armas, por supuesto- el 2 y 3 de febrero de 1989.
